MATITAS DE FRESA

Invitan al Sexto Festival “El Chile y la Fresa” El Pescadero 2017
marzo 29, 2017

CUENTO

A pesar del chingo de calor que hacía; ensombrerados por las matas de mango de la Huerta de Chichi Ruiz, la primera por el camino de la Playa; que chulada, unos batos Josefinos, a toda madre pistiaban.
Como si hiciera mucho, de bastante tiempo de no verse, todo era risas y alboroto, era un vil relajo, entre carcajadas, gritos, cervezas, música ranchera y las constantes miadas, era un contento, animoso y entusiasmado desmadre. 

Extraños, Ajenos al mundo, guango les venía todo; ni calor sentían, que chulada, con un clima veraniego de muy altas temperaturas, con la calma del mes de agosto a pleno mediodía, de todo hablaban menos de ¡la calor! 

Botella tras botella, miada tras miada, en pisto alegre pisto, algo así como, millonarios enanos quinceañeros sin control, solo existía su mundo de ocurrencias, dichos, chistes, burlas, valiéndoles madre. Eso, era todo para ellos; así era. 

 

El Pescadero B C S

En sentido contrario, una Todasanteña familia en visita Josefina, descansaban cerquita. En ellos, manifiesto era su enfado, molestia, acaloramiento, y fatiga. Descansar, refrescarse un rato, un poco, bajo las matas de mango, eso nada mas querían, para tanta calor. 

En eso, la única señora mayor del grupo aquel, se acercó a la bola de borrachos, con un chingo de coraje, les dijo; ¡Bola de borrachos, flojos! Como no se ponen sembrar matitas de fresa; como en El Ejido Pescadero.. Les debería dar vergüenza, pinchis huevones relajientos.

 
Escuetamente simple, de esas replicas que efectivamente llegan no sé dónde; como contesta tuvo:
Mira, me que simple la doña, ¡Ya nos viera pistiando abajo de las matitas de fresa! Curiosos nos íbamos ha ver. ¡Agarre la onda doña! 

El Pescadero B C S

De plano que no tienen arreglo, dio media vuelta y se fue, echando lumbre, solo dijo, vamos viejo, aquí no podemos estar. ¡Diatiro la friegan estos pinchis borrachos¡! 

Dicen que en el camino, ya más calmados, casi llegando a Todos Santos, (Fundando en 1724) donde el clima es otro, por las corrientes marítimas del Océano Pacifico, y los mangos se dan en septiembre y octubre, y donde la jalea de mango no es tan buena como la de San José, pero que en guayabate nos ganan. La señora expreso, ! que bárbaro que calor hace en San José del Cabo!
Inmediato esposo le preguntó, ¿Qué te dijeron vieja?. 

 
Ya platicado el asunto, con la respuesta de las matitas de fresa, soltaron la carcajada por la simple y ocurrente respuesta de aquel curioso borracho Josefino, que nunca olvidaras, las matitas de fresa.