VALERIO GONZALEZ CANSECO

PERSONALIDADES HISTÓRICAS DE BAJA CALIFORNIA SUR

Valerio González Canseco

Nació en Santiago, B.C.S., el 6 de septiembre de 1898, ocupando el segundo lugar de los hijos del matrimonio de Carlos González de la Toba y Manuela Canseco Cota, hijos que llevaron los nombres de Miguel, Valerio y Manuel. Valerio creció en el seno de una familia emprendedora de comerciantes, ganaderos y agricultores, debido a lo cual aprendió, día a día, amar a su tierra y a conocer a fondo el sur peninsular y lo que producía.

Con el paso de los años demostró haber nacido dotado de una extraordinaria capacidad para el comercio, pues desde muy corta edad su diversión favorita era simular la compra y venta, tanto del ganado, de las hortalizas, y las cargas de hojas de damiana y orégano, con los que estaba tan familiarizado, y simulando estas ventas y compras, cada vez de forma distinta, sorprendía a sus familiares, que se sumaban gustosos al juego; tampoco se perdía la oportunidad de asistir a presenciar los embarques de ganado, granos y hortalizas, provenientes de los ranchos propiedad de su familia, estos embarques tenían como destino tanto la contracosta, el interior del país, así como el extranjero. 

LA VOZ DEL SUR años después ALMACENES GONCANSECO

También fue testigo de los trueques de alimentos frescos por mercancías de diversa índole, que efectuaban los tripulantes de los barcos con los rancheros.

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Debido a la prematura muerte de su padre, él y sus hermanos se acogieron con su abuelo materno Valero Canseco, quien, entre sus propiedades, poseía la hacienda Eureka, lugar situado muy cerca de las costas de La Ribera, sitio por donde se efectuaban los embarques de la producción, en especial de Santiago, y donde pasaban el tiempo necesario para ello.

Valerio Gonzalez Canseco, al volante con empleados de gobierno y comerciantes

de San José Del Cabo a un costado de la Escuela Primaria Gregorio Cruz 1930

Una vialidad muy importante en San José del Cabo lleva su nombre en la Colonia Primero de Mayo, en reconocimiento por su altruismo al donar terrenos para la construcción de la Escuela Secundaria y el Hospital Raul A. Carrillo, así como la donación el terreno que ocupa el balneario público de Palmilla; entre otros.